Los ajÃes son una de las cosas más sabrosas que uno pueda comer y si le sacamos la piel, la textura cambia y el sabor es, a mi gusto, aún mejor.
Con los precios que tenemos hoy no sabemos todavÃa si es mejor comprar los morrones en lata o los frescos y sacarles la piel. Generalmente yo los compro frescos y me tomo el trabajo de pelarlos.
El procedimiento de pelado es más sencillo de lo que muchos piensan. Necesitamos solo una hornalla de nuestra cocina.
Encendemos la hornalla y colocamos el morrón sobre el fuego directo, cuando la piel se vuelva negra, giramos y esperamos hasta que todos los lados estén negros.
Con agua del grifo y nuestras manos vamos quitando la piel quemada, cortamos al medio y retiramos las semillas.
Para evitar que se sequen podemos dejar en un plato con aceite de oliva.
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